Siempre
me ha parecido estúpido que el dolor que he experimentado no me haya dejado
ninguna marca visible; a veces, sin una forma de demostrármelo, empiezo a dudar
de que haya pasado todo aquello, ya que los recuerdos se vuelven borrosos con
el tiempo. Quiero tener presente que, aunque las heridas sanen, no desaparecen
para siempre, sino que las llevo conmigo a todas partes, en todo momento, y así
son las cosas, así con las cicatrices.
No hay comentarios:
Publicar un comentario